Se tiñe de sangre el periodismo en México
Por Fernando Olivas.
Nuevamente el periodismo de México, se encuentra de luto por el asesinato de las compañeras periodistas Rocío González Trápaga y Ana María Marcela Yarce Viveros quienes fueron encontradas en las inmediaciones de un panteón de la delegación Iztapalapa, al oriente de la ciudad de México
González Trápaga y Yarce Viveros, se encontraban desaparecidas desde la tarde-noche del 31 de agosto y el día 1 de septiembre fueron encontradas por la mañana en un terreno utilizado como cancha de futbol en la Colonia Predio Maravillas en la delegación Iztapalapa, al oriente de la ciudad de México, completamente desnudas; atadas de pies, manos y tenían un lazo alrededor del cuello, de acuerdo a la información de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Marcela Yarce Viveros era fundadora y reportera de Contralínea y se encontraba al frente del área de Relaciones Públicas de la revista semanal, mientras Rocío González Trápaga fue reportera de Televisa y fue directora de FONACOT.
El Sindicato de Redactores de Prensa (SNRP) exige a las autoridades locales y federales, la detención y castigo de los asesinos tanto intelectuales como materiales, para que estos oprobiosos crímenes que se unen a la larga lista de periodistas sacrificados en este 2011, 8 en total no se conviertan sólo en una estadística.
González Trápaga y Yarce Viveros, se encontraban desaparecidas desde la tarde-noche del 31 de agosto y el día 1 de septiembre fueron encontradas por la mañana en un terreno utilizado como cancha de futbol en la Colonia Predio Maravillas en la delegación Iztapalapa, al oriente de la ciudad de México, completamente desnudas; atadas de pies, manos y tenían un lazo alrededor del cuello, de acuerdo a la información de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Marcela Yarce Viveros era fundadora y reportera de Contralínea y se encontraba al frente del área de Relaciones Públicas de la revista semanal, mientras Rocío González Trápaga fue reportera de Televisa y fue directora de FONACOT.
El Sindicato de Redactores de Prensa (SNRP) exige a las autoridades locales y federales, la detención y castigo de los asesinos tanto intelectuales como materiales, para que estos oprobiosos crímenes que se unen a la larga lista de periodistas sacrificados en este 2011, 8 en total no se conviertan sólo en una estadística.
Asimismo el SNRP por medio del secretario de Trabajo, Rogaciano Méndez González expresa sus condolencias a los familiares de las comunicadoras asesinadas, así como a sus compañeros de sus compañeros de la revista Contralínea.
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